¿Cómo mantener los toldos durante el invierno?
Con la llegada del invierno, los toldos sufren las consecuencias de los bruscos y continuos cambios del tiempo. La lluvia, el viento o la nieve pueden afectar a su estructura hasta deteriorarla por completo, por ello, es imprescindible conocer el correcto mantenimiento de toldos. En este post te damos más información sobre los dos procesos que debes seguir para protegerlos durante esa época.
Es esencial que cada cierto tiempo realices revisiones de los parasoles para asegurar su posterior mantenimiento, las anuales son las más frecuentes y recomendables. Cuenta para ello con especialistas en el sector, quienes encontrarán los posibles fallos y te darán las más eficaces soluciones. De manera general, los expertos recomendamos que se haga especial hincapié en las partes fijas y en el motor.
Pautas para el mantenimiento de toldos
Existen distintas pautas de mantenimiento, entre ellas, destacamos:
– En caso de que haya un fuerte viento, es importante recogerlos lo antes posible para evitar roturas y desniveles.
– Cuando llueva o nieve, es aconsejable que se enrollen una vez se hayan secado. De lo contrario, se favorece la proliferación de la humedad y, por consiguiente, su putrefacción.
– Si lo que quieres es guardar tu toldo hasta la llegada del verano porque resides en una zona especialmente inestable, es imprescindible que separes el faldón y lo resguardes enrollado en una zona seca.
– Limpia rápidamente las posibles manchas, siempre con jabón, un cepillo y agua fría. Dependiendo del tipo de material, puedes optar por unos medios u otros: en el caso de los de lona, servirá un aspirador y si es de plástico, un chorro de agua a presión. En ningún caso utilices detergentes.
– Aplica cera o aceite a las bisagras cada cierto tiempo, así garantizarás una óptima movilidad.
Con un mantenimiento adecuado y las revisiones pertinentes, conseguirás alargar la vida útil de tus toldos y que luzcan siempre en buenas condiciones.